Publicado: 11-10-2022
Recientemente ha sido publicado en el BOE el cuerpo legislativo que permite la creación de una nueva forma societaria, las Sociedades de Beneficio e Interés Común (SBIC), figura jurídica que abarcará las Empresas con Propósito en España. Esta nueva herramienta societaria recoge las empresas que generan, además de un retorno económico, un beneficio social y ambiental.
Se encuentra recogida en la Disposición adicional décima de la Ley 18/2022, de 28 de septiembre, de Creación y Crecimiento empresarial (Crea y Crece).
B Lab Spain es una organización sin ánimo de lucro que ha coordinado la iniciativa #EmpresasConPropósito para solicitar el reconocimiento legal de las SBIC. Uno de sus principales argumentos es que este tipo de sociedad ya existe en países de nuestro entorno como Francia e Italia y está contando con una gran acogida.
En Francia, las denominadas Enterprise à misión están obligadas por ley a contar con un organismo dentro de la empresa que coordine, organice y supervise la ejecución de su razón de ser y propósito empresarial. Además, deberá tener un tercer auditor que supervise el cumplimiento de dichos objetivos.
Por su parte, Italia, con la Societá Benefit está experimentando un interesante crecimiento. Mientras que la creación empresarial ha sufrido una recesión del 8%, este tipo de sociedades se han incrementado en un 43%.
Para comprender las Sociedades de Beneficio e Interés Común (SBIC), es necesario hacer un inciso en las denominadas Empresas con Propósito:
Dentro de la gestión empresarial, el concepto de beneficio con propósito es uno de los temas más actuales. Busca plasmar la idea, cada vez más extendida, de que las empresas deben ir más allá de buscar ganancias monetarias ésta es, obviamente, su finalidad principal- siendo responsables con las consecuencias y el impacto global de sus actividades, todo ellos a través de su involucración en acciones socialmente responsables que tengan una repercusión positiva en el entorno en el que operan.
Se busca incentivar y acelerar este tipo de sociedades, las SBIC, para alinear los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) a través de la obtención de altos estándares sociales, medioambientales y de buen gobierno corporativo.
Mejorar los procesos de crecimiento empresarial es esencial para el aumento de la productividad, la calidad del empleo y la internalización, objetivos clave para dotar a España de una economía fuerte.
Además de la creación de las SBIC, la Ley de Creación y Crecimiento empresarial recoge una serie de mejoras para agilizar y mejorar el proceso para la creación de empresas:
- Facilidades para la creación de empresas: se reduce el coste económico y se simplifican los trámites para su constitución.
Una de las principales novedades en este aspecto es que a partir de ahora se permitirá constituir Sociedades de Responsabilidad Limitada con un capital mínimo de 1 euro, eliminando así el mínimo legal de 3.000 euros existente hasta la fecha.
Como hemos desarrollado en nuestro artículo spain-allow-incorporation-company-one-euro-capital
- Facilidades para el crecimiento de las empresas: se eliminan regulaciones innecesarias y se establecen procedimientos más agiles. Entre otras, se modifica la Ley de liberalización del comercio para ampliar el listado de actividades económicas exentas de licencia.
- Medidas contra la morosidad: la morosidad en operaciones comerciales supone una de las principales causas de falta de liquidez y rentabilidad de muchas empresas, en especial las pymes.
Por ello, este cuerpo legislativo otorga una mayor trazabilidad y control de pagos a través de la obligación de expedir y remitir factura electrónica en todas las relaciones comerciales a empresas y autónomos. Entre otras ventajas.
El párrafo tercero Disposición adicional décima de la Ley 18/2022, de 28 de septiembre, de Creación y Crecimiento empresarial (Crea y Crece) establece que esta nueva figura empresarial deberá someterse a desarrollo parlamentario para su validación, fijación de criterios:
Mediante desarrollo reglamentario se contemplarán los criterios y la metodología de validación de esta nueva figura empresarial, que incluirá una verificación del desempeño de la sociedad, quedando sujetos tanto los criterios como la metodología a estándares de máxima exigencia.
Por ello, es importante observar con cautela los pasos que se vayan dando en el ámbito regulatorio para este nuevo tipo de sociedad y prestar especial atención a la acogida que tenga entre los empresarios.